¿Sabías que la palabra metabolismo proviene del griego metabolé (μεταβολή) y significa cambio, transformación? En medicina, se refiere al conjunto de reacciones bioquímicas, comunes a todos los seres vivos, relacionadas con la síntesis y degradación de tres tipos de moléculas elementales (aminoácidos, lípidos y carbohidratos). El metabolismo nos ayuda a poner en marcha todos aquellos procesos biológicos que garantizan el equilibrio en cada una de nuestras células y, por tanto, la vida.
Coloquialmente, se dice que “la salud entra por la boca”, siempre y cuando seleccionemos bien los alimentos y las cantidades que ingerimos, ya que generalmente tenemos preferencia por ciertos alimentos que pueden derivar en desequilibrio a nivel celular. A esto se suma la forma en la que metabolizamos los alimentos, ya sea rápida o lentamente.
Por lo tanto, en ocasiones podemos hablar de un metabolismo lento o rápido, que se refiere a la velocidad con la que nuestro cuerpo realiza todas estas funciones. Cuando nuestro metabolismo es más rápido, el organismo quema más calorías, y al ser lento nos predispone a quemar menos calorías y a engordar.
Aquí te damos algunas recomendaciones para que puedas aprovechar al máximo tu metabolismo, que junto con la actividad física y la incorporación de Redustat®, ayudarán a que logres tus metas:
Come sanamente a menudo. Esto permite consumir menos calorías, evita pasar hambre y mantiene activo tu metabolismo, entra cada comida, sobre todo en aquellas personas que realizan actividad física de forma rutinaria.
Mantén el desarrollo de los músculos. Los músculos queman energía para convertirla en calor y mantener una temperatura adecuada.
Duerme a tus horas. Dormirte garantiza un balance hormonal, manteniendo el metabolismo en condiciones óptimas.
Prioriza la ingesta de proteínas. Su beneficio es superior al de los carbohidratos, ya que estos últimos enseguida de ser ingeridos se almacenan en forma de grasa. Toma proteínas, pero de forma equilibrada, los excesos no son recomendables.
